Mis noches no son ni serán iguales sin ti pero de a poco me
acostumbraré, tu olor se irá de las sábanas, las cosas que te recuerdan se
cargarán de un nuevo sentido y ya no dolerás. Esas lágrimas que acompañan mi
sentir limpiarán, quedará lo puro que en el fondo llegué a sentir y aún sigue
ahí. Esperas mis palabras de recriminación, mis expresiones de reclamo y frases
con carga de rabia; esta vez quiero agradecerte los buenos momentos vividos,
las sonrisas provocadas y compartidas.