CONTENIDO PROTEGIDO POR CREATIVE COMMONS
En Bola Comunicaciones por Diego Londoño se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Unported.
Basada en una obra en enbola.blogspot.com.
Friday, September 28, 2007
ARENAS FUE EL MENOS CIEGO
Los dos maestros internacionales más jóvenes de Colombia, titulación mundial para ajedrecistas destacados, se enfrentaron a la ciega: ojos vendados, concentración y memoria puestos a prueba.
Antes de ser asesinados, sus familiares supieron que él había conquistado América Latina: su talento cobraba fama mundialmente. Polonia era invadida por los nazis y él se salvaba por estar representando a su país en la Olimpiada de Ajedrez, de Buenos Aires, Argentina. Mientras en los campos de concentración sus seres queridos permanecían sin esperanzas, Miguel Najdorf se proponía batir el récord mundial de partidas de ajedrez a la ciega.
Su intención era clara y el objetivo se cumplía, según lo que le dirían personas que sobrevivieron al Holocausto: su familia supo de su récord, debido a la amplia difusión que los medios de comunicación le dieron en la época. Jugar sin mirar el tablero fue la más reconocida habilidad de Miguel Najdorf, virtud que otros ajedrecistas perfeccionaron en cautiverio, durante la Segunda Guerra Mundial, cuando pocas eran las distracciones a la mano.
En 1997, a los 87 años de edad, falleció el polaco, nacionalizado argentino, Najdorf. Una década después, David Arenas y Juan Carlos Guerrero rememoraban al Gran Maestro polaco-argentino, cuando se enfrentaban en la Universidad EAFIT, de Medellín, el miércoles 26 de septiembre de 2007. El sorteo de piezas dio las blancas a David Arenas, el más joven Maestro Internacional colombiano de la historia (13 años, en 2005). Una venda azul para Guerrero y una amarilla para Arenas excluyeron temporalmente el sentido de la vista. 1.e4 c5 2.Cf3 d6 3.d4 cxd4 4.Cxd4 Cf6 5.Cc3 a6: como si su espíritu estuviera presente, jugaban la Variante Najdorf de la Defensa Siciliana, otro de los legados que inmortalizaron al ajedrecista judío en los libros y en las memorias de quienes estudian el juego ciencia.
Garry Kaspárov, para muchos el más grande de la historia, siempre temió dañar su cerebro al esforzarse demasiado en análisis mentales sin referentes visuales, exhibición que ahora tenía enfrentados al campeón del Centroamericano Sub-20 2007 en El Salvador, MI Juan Carlos Guerrero, con quien representará a Colombia en la categoría Sub-16 en el Mundial de Turquía, dentro de un mes, MI David Arenas. Guerrero, pese a tener las piezas negras, jugó de forma agresiva. Ambos buscaban la activación de sus piezas y el ataque al rey contrario desde las primeras jugadas.
Los curiosos se acercaban a la cafetería central de la universidad, aunque la mayoría sin entender cómo pueden tener en su cabeza el tablero de ajedrez. “Decidí atacar el flanco de rey, un plan relativamente nuevo y empleado en el Mundial en curso”, relató Guerrero, de 18 años, luego de que la venda fuera retirada de su rostro y sus ojos recibieran luz de nuevo. El estudio teórico de ambos jugadores facilitaba la asimilación de cada movimiento y así advertir y prevenir amenazas.
Una partida muy bien jugada se definió cuando Arenas aprovechó el descuido de su rival. Un error de cálculo que, por no constatar con sus ojos lo que su memoria podía indicar, hizo que Guerrero dejara su dama en el aire. Y Arenas lo resumió al final de la partida: “supe contener el ataque y salir victorioso después de un error de ´visión` de Guerrero, quien se confundió con la posición de una torre”
Tuesday, September 18, 2007
Subscribe to:
Posts (Atom)